INTRODUCCIÓN

La provincia de Alicante es un verdadero paraíso para el senderista, multitud de espectaculares rutas surcan sus sierras que aunque a primera vista puedan no tener mucho encanto, basta alejarnos del conglomerado urbanístico y adentrarnos en sus montañas para sorprendernos gratamente de espectaculares parajes y bellas panorámicas en muchas ocasiones con la franja costera como línea infinita.
Es el caso de la ruta que proponemos esta vez, una circular al Montgó con ascensión a su vértice de 753mts de altitud y al de la Cruz que alcanza 692.

Es uno de los Parques Naturales de la Comunidad Valenciana, encajado entre las poblaciones de Dénia y Jávea, dos núcleos turísticos de primer orden en la comarca de la Marina Alta y prolongado hasta el mar por una plataforma en la que cae en abrupto acantilado formando el Cabo de San Antonio.
Comenzamos la excursión en un punto alto del complejo entramado de la urbanización que acaba en la misma falda de la montaña, muy cerca de la ermita del Pare Pere (ver track de acercamiento).
Subiremos primeramente por pista para después seguir por la senda del Racó del Bou. Con opción a visitar la cueva de l’Aigua, seguiremos nuestra ascensión hasta el pico de la Cruz. Volveremos a bajar para subir después al Montgó, ambos con fantásticas vistas.

Por una vertiginosa senda bajaremos para visitar la cueva del Camell, donde conectaremos con un camino empedrado que recorre toda esta parte de la montaña ofreciéndonos constantes panorámicas de la franja costera hasta llegar al final de nuestra ruta.
Una espectacular excursión que merece la pena disfrutar para todo el día, ralentizando el paso, incluso parándonos a contemplar las constantes panorámicas y rincones que nos ofrece esta mágica montaña, sin olvidar la flora cuya variedad con algunos endemismos nos cautivará con su belleza que en esta época (primavera) se engalana con su mejor vestido.

Hay que llevar agua para todo el recorrido. Aunque a escasos Km. del final encontramos varios pozos (abierto solo uno de ellos), desconozco el estado de este agua para el consumo.
La ruta es bastante exigente en cuanto a esfuerzo, ya que vamos a superar algunos fuertes desniveles y un acumulado a tener en cuenta, caminando por sendas cuyo firme es bastante pedregoso, en ocasiones con afiladas piedras erosionadas por los elementos, con lo que el caminar no es cómodo, haciéndose aconsejable el uso de calzado adecuado para proteger nuestros tobillos.

Hay algunos cortos tramos muy aéreos en los que pasamos junto al vacío, dato también a valorar para los que sufren de vértigo.

Otro dato que creo puede ser de ayuda para los que tengan alguna lesión de rodilla, es la pronunciada bajada que haremos después de subir a la cima del Montgó.

DESCRIPCIÓN DE LA RUTA

Comenzamos junto al panel del Parque Natural e información de las rutas de senderismo que podemos hacer, (ver acercamiento al punto de inicio).
Cruzamos la cadena y tomamos la pista de subida, enseguida vemos la costa y la ermita del Pare Pere.

Después de 1km de ascenso en lazadas, llegamos al primer desvío. Este será el punto común de la excursión, de vuelta vendremos por el lado izquierdo, ahora tomamos desviación hacia la derecha (hacia el Racó del Bou, hay paneles). Sin apenas desnivel y por un camino muy cómodo pasamos bajo grandes murallones para comenzar a subir por la senda del Racó del Bou.

Se vuelven a ampliar las panorámicas hacia el golfo.

Dejamos el desvío de la Cova de l’Aigua para seguir en ascensión por la derecha (hay panel). Pasamos por algún que otro paso muy aéreo

y poco después dos desvíos muy seguidos, siempre en fuerte ascensión llegamos a culminar en otro cruce de sendas, ya en la parte alta desde donde disfrutaremos de formidables vistas.
A la derecha nos conduce por la senda de Jesús Pobre, nosotros seguimos las indicaciones hacia la cima, o sea hacia la izquierda (hay panel).
En ascenso mucho más suave recorremos una zona degradada por los incendios en el que se han apoderado del terreno las jaras, pequeños brezos, aliagas, palmitos y coscojas entre otros. Ya podemos ver a lo lejos nuestra primera cima, la Cruz.

La senda va buscando suavizar en lo posible la ascensión, desviándose en ocasiones de la lógica trayectoria del vértice. En unos 1,4km desde el último desvío podemos optar por subir al alto de la Cruz, donde como no encontraremos tan venerado símbolo religioso, y desde el que las fantásticas panorámicas a todas las vertientes nos cautivarán. Para ello subiremos por la izquierda caminando por encima de las rocas sin senda muy definida con signos evidentes de la fuerte erosión a la que han sido sometidas (hay panel).

Vistas hacia el pico del Montgó y el Cabo de San Antonio con la plataforma de les Planes.

Al fondo podemos ver el Aitana, Puig Campana y sierra de Bernia, entre otros.

Bajamos por el mismo camino y llegados de nuevo al cruce giramos a la izquierda para enfilarnos hacia la próxima cima, la del Montgó. Siempre visible, recorremos la ladera en suave descenso entre el tupido manto vegetal mediterráneo, para luego comenzar la subida que en fuerte pendiente nos lleva hasta su cumbre.

Allí vemos el pilón del punto geodésico y un poste con paneles del PR.CV355, estamos a 753mts de altura s.n.m.

Después de disfrutar de unos momentos de relax observando el amplio paisaje, seguimos de frente según hemos llegado para bajar por una empinada senda hacia el sureste, en la que saltamos más que caminamos por una cresta de rocas, con pasos bastante aéreos que le dan cierto matiz de aventura.

Llegamos a un cruce de sendas marcadas por el PR, donde encontramos un panel del mismo. Seguimos dirección Dénia. Seguimos bajando sin tanto desnivel aunque el simulacro de sendero es incómodo por la cantidad de piedras que hay en el.

En unos 300mts llegamos a la cueva del Camell.

Cruzamos el pedregoso barranco para salir a un camino que en ocasiones vemos empedrado, según nos informaron es una calzada Romana.

Con un cómodo caminar recorremos esta parte del Montgó disfrutando de bellas vistas hacia sus gigantescas paredes y la amplia costa, aunque el punto negativo sea la cantidad de chalates que han «crecido» como si fueran champiñones.

Pasamos por varios pozos, están cerrados todos menos uno pero desconozco si se puede beber el agua.

Poco mas de 4km y llegamos a un desvío por donde podemos subir a la cueva de l’Aigua.
Continuamos 250mts y volvemos al primer cruce que nos encontramos al comenzar la ruta horas antes. Bajamos por la derecha y en poco llegamos a los coches.

 DATOS DE LA RUTA

  • Fecha de la excursión: 2-5-2009
  • Tipo de ruta: Ruta circular
  • Nivel de dificultad: Moderado-Alto
  • Longitud: 15,24 kilómetros
  • Desnivel acumulado de subida: 837 mts
  • Desnivel acumulado de bajada: 837 mts
  • Tiempo en movimiento: 5h
  • Tiempo Total:7h
  • POR VUESTRA SEGURIDAD ES MUY IMPORTANTE QUE LEAIS ESTO

ACERCAMIENTO AL PUNTO DE INICIO

Si entramos a Dénia por la carretera CV-725 que viene desde Ondara, llegamos a una amplia rotonda junto al McDonalds y seguimos recto para entrar a otra mas pequeña.
Salimos de ella por la 1ª a la derecha (Av. de Alicante) para desviarnos en 300mts otra vez por la derecha y tomar la Av. del Montgó. En 200mts llegamos a la plaza Jaume I, seguimos por la derecha y nos salimos de ella en la 2ª calle. Pronto nos desviamos (250mts) a la izquierda y cruzamos la vía del tren, para seguir por el Camí del Pou de la Muntanya.
1km sin dejar el trazado principal del camino (mas ancho) giramos a la derecha en una calle cuya esquina está repleta de buzones, para dirigirnos hacia la colina Mora, subiremos por ella entre pinos y por varias curvas llegamos hasta el punto de inicio junto a un chalet, donde veremos un panel del Parque Natural y una cadena que impide el paso de vehículos a la pista de subida hacia el Montgó.

ANÉCDOTAS Y MOMENTOS DEL DÍA

Al fin se ha realizado una de las rutas que teníamos pendiente desde hace muuuucho tiempo. La verdad es que lo intentamos en otra ocasión hace años pero las nieblas acabaron por amilanar nuestros ánimos para culminar la ruta, así que la hemos ido dejando hasta que en este caso hemos elegido el mejor de los días posibles. Así nos lo pareció a nosotros, pero también coincidimos totalmente con esta opinión contrastándolo con algunos caminantes que nos cruzamos y que han recorrido esta montaña en numerosas ocasiones. Era un día con temperatura agradable, bastante visibilidad, sin aire, solo en ocasiones con una ligera brisa muy agradable y lo mejor de todo, la flora como no recuerdan haberla visto nunca ellos.
Recopilando información en la red, me pareció interesante la opción que nos da José Manuel en su magnífica Web Roca Coscollá ya que nos da una visión bastante completa de la sierra, tocando todas las vertientes a la vez que nos proporciona también variadas panorámicas de gran belleza.
Quedamos Lute y yo con uno de “los José” del grupo, José López en la entrada de Dénia. Finalmente nos dirigimos hasta el punto de partida de la ruta, no sin antes tener algunas pérdidas en la laberíntica urbanización…. esto también forma parte de la aventura.
Comenzamos y enseguida se abre el paisaje hacia el mar, una visión majestuosa del amplio golfo de Valencia, pero que de repente hace saltar todas las alarmas de la lógica, una agresiva urbanización que desde la misma línea de playa agrede la llanura costera hasta las mismas faldas de la montaña….no me extraña que en Europa nos tiren de las orejas.
Antes de subir al alto de La Cruz hablamos con tres senderistas que nos informa sobre la cueva del Agua y nos dicen que la tienen cerrada temporalmente, desistimos aunque en un primer intento nos habíamos asomamos a un balcón impresionante desde el que pudimos verla.
Mas tarde nos volvimos a juntar en la Cruz y de nuevo mas bla, bla, bla. El trasiego del ir y venir de excursionistas, aunque de este lado no sube mucha gente, era inevitable pararse y hablar con algunos de ellos, los mas receptivos y abiertos, al fin y al cabo esto también es uno de los encantos del senderismo. Antes de culminar el Alto del Montgó coincidimos con una agradable pareja que reiteraba como los anteriores lo que antes comente sobre el mejor día para esta excursión.
Casualmente coincidimos de vuelta con esta misma pareja ya casi al final de la ruta y volvimos a cruzar unas palabras con ellos. Creo que la mayoría de anécdotas tanto buenas como las no tan buenas las generamos nosotros mismos con nuestra actitud.
Otra de las situaciones que nunca queremos que ocurran pero que también forman parte son las referidas a las lesiones y José con tan mala pata….. Nunca mejor dicho, se torció un tobillo al bajar del Montgó haciéndose un esguince, espero que se le pase pronto y vuelva a pasar mas casiaventurillas con nosotros.