LA TINENÇA DE BENIFASSÁ 6-7-8/12/08

En esta ocasión nos hemos acercado a la Tinença con familia y amigos. Pasear por sus pintorescos y tranquilos pueblos, así como por sus espectaculares alrededores es todo un placer para los sentidos. Se trataba de desconectar del mundanal ruido y del incesante estres de la ciudad, como digo en un ambiente familiar, con cortos y relajados paseos. Por supuesto también hemos disfrutado como siempre de la cocina casera que en el Albergue de la Font Lluny saben elaborar.

De camino a la Puebla de Benifassá, donde esta ubicado el albergue, nos desviamos para hacer una visita al museo de la Valltorta, una excelente muestra de uno de nuestros patrimonios de la humanidad, las pinturas rupestres del arco Mediterraneo. Ademas de la exposición, es interesante el audiovisual que exponen en el museo, ambientados adecuadamente en una sala con la reproducción a tamaño natural de la Cova dels Cavalls. Complementando la visita al museo nos ofrecen también la posibilidad de inspeccionar con guia y gratuitamente estos abrigos.

Nuestra corta excursión por la montaña en la zona nos llevó hasta Fredes. Este es el punto por donde el GR7 entra en la comunidad Valenciana desde tierras Catalanas, para recorrer longitudinalmente todo el territorio de la comunidad, volviendo a salir de ella por la población de El Pinoso, en Alicante. Nuestro paseo en cuestión, parte desde las cercanías de Fredes, en el lugar llamado el Pinar Pla y nos acerca hasta el refugio guardado de Font Ferrera ya en tierras Catalanas, lugar de gran encanto y desde donde se pueden realizar infinidad de excursiones. Una pista de tierra que parte a la izquierda del pueblo, nos acerca en unos 5km al punto de inicio (Pinar Pla).
Aquí el GR que se asoma a la pista y vuelve a adentrarse por senda en el bosque. Aquí veremos un panel del GR y también podremos dejar aparcados nuestros vehículos.
 

Un bosque de pinos con una formidable masa de boj por donde en ocasiones forman «túneles», harán las delicias de cualquier caminante. Salpicados, encontramos también al exigente acebo, delatándose en esta época los ejemplares hembras con sus típicas bolitas rojas.

Una corta excursión que sin darnos cuenta nos pasará de una comunidad a otra dentro de una de las sierras mas salvajes que conozco en la península .

 

 

 

DATOS DEL PASEO

Ruta lineal

Distancia: 2’46km (solo ida)

Tiempo: 30′(solo ida)

Antes de marcharnos tuvimos la ocasión de inmortalizar el momento de la despedida con parte del equipo que nos ha conquistado entre otros aspectos, por el estómago. Dentro de la siempre impoluta cocina, entre fogones, cacerolas y ollas nos despedimos para volver, a ser posible pronto.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 
 
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