Esta vez vamos a dar un paseo por la dehesa del Saler, zona integrada dentro del parque natural de la albufera.
Antiguamente ,la albufera era un golfo marino, actualmente transformado en un lago de aguas dulces. Este lago esta dentro del catálogo de zonas húmedas de importancia internacional (Ramsar) y tiene una protección especial para las aves.
Hay varios itinerarios senderistas en los que las bicicletas también se hacen un lugar aquí. Estas rutas están adaptadas totalmente a paseos en familia, de muy agradable andar y de nulo desnivel.
Estos itinerarios están señalizados con paneles y pequeños mástiles de madera con varios colores, según la ruta. Las sendas y caminos ,unas veces de tierra ,
otras de hormigón (para mi, mala elección)
nos llevan por distintas zonas de un valor excepcional, unas veces por un bosque impenetrable de pino, otras por dunas de fina arena y otras a pequeñas lagunas.
Para poder disfrutar plenamente del paseo, es aconsejable acudir y empezar éste, no mas de las 10 y media de la mañana, puesto que a partir de esta hora aproximada, empiezan a acudir mucha gente a pasear ,en bicicletas y un trasiego de ir y venir de vehículos para situarse en los merenderos, poder comer y pasar el día, con lo cual nos quita el encanto del sonido puro del bosque.
Hay una gran variedad de flora, como la retama, jarillas, lentisco, zarzaparrilla, tamariscos, etc .Y sobre todo un bosque bien denso de
pino carrasco, sin olvidarnos de las aves, como la curruca cabecinegra
y el petirrojo.
Además de otros que ocupan un lugar privilegiado.
Podemos elegir entre seis itinerarios.
Nosotros podemos disfrutar de un día completo, recorriendo los caminos y senderos y cuando el rugir del estomago nos apriete,acudir a unas de las zonas habilitadas,
con bancos y mesas de madera que hay repartidas por la zona y dar cuenta de un picnic al aire libre. ¿No es buena idea?
Fecha de la actividad: 22/4/2007
