Relaja tus piernas y alimenta tu alma….disfruta de un espectáculo visual lleno de vida.

Ermita de San Bartolomé

Ermita de San Bartolomé

INTRODUCCIÓN

Recorrido lineal por el imponente Cañón del río Lobos. Este río y su entorno fue declarado Parque Natural en el año 1985. Nace en tierras de Burgos y se adentra más tarde en zona Soriana, tramo en el que vamos a centrar nuestro recorrido. Con el paso de los años, este curso fluvial ha erosionando la piedra caliza y transformado profundamente el paisaje, creando un espectáculo visual lleno de vida.

El recorrido total del río, sobrepasa los 25km de longitud, pero como hemos dicho, el itinerario propuesto se centra solo en una parte del territorio Soriano, con lo que va a suponer cerca de 10km de distancia (solo ida). Comenzaremos en el término municipal de Ucero (Soria), en uno de los aparcamientos de la entrada al cañón (Valdecea), donde dejaremos aparcado nuestro vehículo.

  • Nota:

Existen varios aparcamientos a lo largo del primer tramo de acceso. Hay que informarse sobre la accesibilidad al más cercano del comienzo de la ruta, llamado Valdecea, puesto que dependiendo de la época, el más accesible al inicio de la ruta al parecer queda restringido.
Es recomendable pasarse por el centro de interpretación del Parque que esta situado en la entrada del cañón.
975.376.590 / 975.363.564 (Casa del Parque)

El recorrido coincide con tramos del GR86(Sendero Ibérico Soriano), el PR- SO 67 y el PRSOBU65.
Es una ruta para toda la familia y un buen complemento a otras jornadas más duras de montaña.
Por su escaso desnivel es ideal para tomárselo con calma y disfrutar del precioso entorno, maravillándonos de las imposibles formaciones calizas que la naturaleza ha moldeado, de la exuberante vegetación que exhala el hilo de vida, a la vez que nuestra mirada se alza constantemente en busca del vuelo de la multitud de buitres leonados que anidan en estas escarpadas y retorcidas paredes.
En cuanto a las fuentes, hay que decir que solo encontramos en los dos extremos del recorrido.

  • Sugerencias:

1ª El recorrido es lineal y como sabéis, en estos casos, si no se desea volver por nuestros pasos hay que dejar aparcados los vehículos en ambos extremos de la ruta. La otra solución pasa por que nos recojan al finalizar la excursión o contratar los servicios de alguna empresa de transportes de la zona. En todas esta alternativas no tenemos ningún problema en el acceso con vehículo al punto final de la excursión, puesto que terminamos en la carretera SO960 que unen las poblaciones de San Leonardo de Yagüe y Sta Mª de las Hoyas, lugar que llaman «Puente de los 7 Ojos».
2ª Este es un espacio Natural al que acuden numerosas personas sobretodo los fines de semana.
Para disfrutar plenamente de este excepcional monumento de la naturaleza, es muy recomendable madrugar un poco y comenzar a caminar sin esta masificación, que a buen seguro agradeceremos.

  • El itinerario:

Aparcamiento de Valdecea-Ermita de San Bartolomé-Colmenar de los Frailes-Puente de los 7 Ojos.

DESCRIPCIÓN DE LA RUTA

Comenzamos en el último aparcamiento dentro del cañón, llamado «Valdecea» (Ver acercamiento al punto de inicio).

Cañón de río Lobos

El grupo en el inicio de la ruta

poza de Valdecea

Aquí encontramos la poza de Valdecea

Seguimos las indicaciones del cartel de madera indicándonos «senda del río».
Con las señales del GR86 y el PR-SO BU 65 y PR- SO 67 llegamos en 1km al magnífico paraje donde se encuentra la ermita de San Bartolomé.

señalizacion el río Lobos

Bien señalizado

Ermita de San Bartolomé

Precioso paraje donde se encuentra la ermita de San Bartolomé

Formaciones rocosas

El lugar es imponente. Llaman poderosamente la atención, las numerosas formaciones rocosas

Cruzamos el río por un pequeño puente de madera, en este lado se encuentra una gran cueva.

Cueva en el Cañón del río Lobos

Tras cruzar el pequeño puente, accedemos a la cueva

Cueva en el río Lobos

Desde el interior de la cueva

Continuamos por este lado y nos encontramos a los 700mts más con «El Colmenar de los Frailes»

El Colmenar de los Frailes

El Colmenar de los Frailes

1’5km después y pasando el río por medio de unas piedras, encontramos un poste señalizador de los senderos. A la derecha sigue el GR86 hacia el barranco de Valderrueda, nosotros seguiremos a la izquierda junto al cauce del río y con solo las señales del PR-SO BU65.

Río Lobos

Cruzamos el río con la ayuda de unas piedras

Cañón de río Lobos

Cuevas y formaciones se suceden continuamente, es un entorno fascinante.

El lento fluir de sus aguas hace proliferar en gran cantidad, los nenúfares, en los que veremos un buen número de ranas que nos amenizan también el recorrido.

Nenúfares y ranas

Podemos ver a las ranas, sobre los abundantes nenúfares,

Pero los reyes y dominantes de este cañón son los buitres leonados, que esperan casi inmóviles en sus posaderos hasta que el sol calienta y abren sus magníficas alas para levantar el vuelo.

Buitres

Veremos bastantes buitres

Cañón de río Lobos

Pasamos un paso junto a la roca en el que hay instalada una barandilla de madera.

Finalmente se amplía el cañón, dejando paso a explanadas en forma de praderas hasta llegar a nuestro final de ruta en el puente de Los 7 Ojos.

Cañón de río Lobos

Llegamos a la explanada en el tramo final

puente de Los 7 Ojos

Puente de Los 7 Ojos

DATOS DE LA RUTA

  • Fecha de la excursión: 29-5-2011
  • Tipo de ruta: Ruta lineal
  • Nivel de dificultad: Bajo-Moderado
  • Longitud: 10km (ida)
  • Desnivel acumulado de subida: 120mts
  • Desnivel acumulado de bajada: 110mts
  • Tiempo en movimiento: 2h30′
  • Tiempo Total: 3h30′
  • POR VUESTRA SEGURIDAD ES MUY IMPORTANTE QUE LEAIS ESTO

ACERCAMIENTO AL PUNTO DE INICIO

En las poblaciones colindantes tenemos carteles que nos indican la dirección hacia el Parque Natural del Cañón del río Lobos, así que no tendremos dificultad en encontrar la entrada al cañón.

Podéis ver con Google Maps, el punto de inicio en el aparcamiento de Valdecea.

Ver mapa más grande

ANÉCDOTAS Y MOMENTOS DEL DÍA

Después de la intensa jornada anterior en la que el grupo disfrutó de las mieles de los Picos de Urbión, hoy tocaba una ruta suave y corta, pero no por ello menos interesante…vamos a decir, diferente.
Debíamos terminar pronto para llegar a casa a unas horas razonables, ya que nos quedaban bastantes horas de carretera después de terminar. Volvimos a contratar los servicios de la misma empresa de autobuses que nos solucionó el transporte en la jornada anterior, nos gustó mucho la profesionalidad con que actuaron y porque no decirlo, nuestro conductor Eliseo, una persona que supo estar en el ambiente del grupo y dispuesta en todo momento.
Nos levantamos temprano, a la misma hora que el día anterior, había que aprovechar el día por dos motivos principales, uno, para no terminar tarde la ruta y volver como dije antes a casa y el segundo motivo, para no coincidir con la gran afluencia de visitantes que tiene este Parque Natural.
El recorrido suave y entretenido dio para mucho, las cámaras de fotos trabajaron a pleno rendimiento…los nenúfares, las ranas encima de los anteriores, los buitres, el llamativo amarillo de los lirios, las paredes retorcidas, todo era un espectáculo….y todo disfrutándolo sin las pulsaciones a cien, ni la lengua como los perros…creo que no estamos acostumbrados a este «relentí» y cuando ocurre hay que disfrutarlo también al máximo.
Hay que decir que tan relajados estábamos que casi nos salimos del cañón, bueno si es que realmente nos salimos. Continuamos alucinados y sin darnos cuenta con el bla bla bla, por el barranco de Valderrueda, por donde corre el GR86 hasta Casarejos…si es que lo que no nos pase a nosotros…Rectificamos pronto y volvimos al desvío para darnos un homenaje allí mismo por lo bien que lo habíamos hecho. Todo tipo de elaborados con nuestro querido gorrino y regado con lo que ya sabéis, fue lo que nos hizo olvidar este piadoso fallo.
Llegamos con puntualidad inglesa al término de la ruta en el puente de los 7 0jos, allí nos esperaba nuestro amigo conductor Eliseo y después de refrescarnos en la fuente nos devolvió a los coches pero no sin antes pararnos en el mirador de la Galiana, desde el que contemplamos el inicio del cañón, o final, según se vea.
No nos podíamos despedir sin el «grito de guerra» después de este fin de semana tan entrañable. Este «grito» es una chorrada como un castillo pero nos hace reír y lo que es más importante…hace salir al niño que tenemos todos dentro.