INTRODUCCIÓN
Ruta circular de senderismo en la comarca del Alto Mijares que partiendo de su capital Cirat (Castellón), recorre parajes con buena masa forestal.
La zona, de abruptas montañas es poco conocida, donde encontraremos la necesaria tranquilidad para disfrutar del entorno. Las alturas del recorrido nos ofrecerá un mirador natural desde el que dispondremos de bonitas vistas sobre el valle del Mijares y su entorno.
Gran variedad de plantas nos acompañaran en un recorrido dominado por el pino, aunque encontramos también representaciones de carrascas, alcornoques, almez, etc… incluso en las zonas de umbría encontramos al arce, el serbal y el durillo, entre otros.
El trazado del recorrido es mayoritariamente por pistas de tierra, aunque caminamos también sobre un buen tramo de senda.
La jornada la hemos complementado con la posibilidad de un baño en las pozas del barranco de Las Salinas, ya prácticamente finalizada la ruta.
Es conveniente llevar agua desde el comienzo, aunque encontramos una fuente a poco mas de la mitad del recorrido.
DESCRIPCIÓN DE LA RUTA
Comenzando en la misma población de Cirat, debemos cruzarlo dirigiéndonos hacia el lado opuesto a la carretera y tomar una pista hormigonada que de subida y pasando junto a alguna casa derruida, cruza mas tarde el barranco de las Salinas.
Unos 70mts después de iniciar esta pista, seguimos por la izquierda en una bifurcación que encontramos junto a una antigua construcción.
De bajada y caminando paralelo al barranco, lo cruzamos poco después en una curva cerrada de la pista.
Aquí y a la vuelta, tendremos la opción para adentrarnos en este bonito barranco, con la posibilidad de darnos un buen baño en sus pozas (hay tablillas).
Dejamos el hormigón para seguir por la pista de tierra en ascenso y obtener buenas vistas de Cirat.
Después de un par de largas lazadas tomamos un camino mas estrecho y en peor estado que parte desde la derecha en ascenso. Este va a ser el punto común de la ruta, de vuelta vendremos por la izquierda.
Este camino va adquiriendo altura poco a poco entre la abundante vegetación donde predomina el pino.
A los 1’8km después del último desvío, cuando la pista comienza el descenso, hay que estar atentos a una senda que debemos tomar a la izquierda de subida. Esta sigue ascendiendo paulatinamente por la ladera abriéndose paso entre la espesa vegetación.
200mts después nos desviamos unos metros para asomarnos a un mirador natural, desde el que disfrutaremos de las espléndidas panorámicas hacia el valle del Mijares, con Cirat al fondo.
Volvemos a la senda para cambiar de sentido y de vertiente. A los 300mts nos unimos a un camino que seguimos por la derecha y pasando junto al ruinoso estado del Corral de la Noguerica, volvemos a salir a una pista mas ancha y en mejor estado.
Caminando a media altura tendremos bonitas vistas del entorno del barranco de Cueva Honda.
1,5km de cómodo caminar nos acerca a otro desvío que seguimos por la izquierda.
Seguimos por la cómoda pista, unas veces bajo la sombra y otras a cielo descubierto, pasando junto a laderas donde afloran las rojas piedras de rodeno.
Algún que otro alcornoque de buen porte se nos pone al paso.
A los poco mas de 2km desde el último desvío, dejamos de lado el camino que lleva al Tormo para seguir de frente y llegar enseguida a una fuente.
Seguimos por firme en buen estado con cambiantes panorámicas del entorno hasta culminar en aproximadamente 2,5km en el lugar donde antes comente que era el punto común de la ruta.
Seguimos de frente y bajamos por el mismo lugar hasta el cruce con el barranco de las Salinas, donde podemos optar en adentrarnos y si procede, darnos un baño.
De vuelta solo queda llegar en poco tiempo hasta Cirat.
DATOS DE LA RUTA
- Fecha de la excursión: 13-6-2009
- Tipo de ruta: Ruta circular
- Nivel de dificultad: Bajo
- Longitud: 13’3km
- Desnivel acumulado de subida: 490mts
- Desnivel acumulado de bajada: 490mts
- Tiempo en movimiento: 4h
- Tiempo Total: 5h
- POR VUESTRA SEGURIDAD ES MUY IMPORTANTE QUE LEÁIS ESTO
ACERCAMIENTO AL PUNTO DE INICIO
ANÉCDOTAS Y MOMENTOS DEL DÍA
Todo apuntaba a que este sábado lo pasaríamos en la Sierra de Gudar, pero un cambio de planes en un intento de reunir a toda la tropa, hizo que nos decidiéramos por una zona mas a tiro de piedra, ya sabéis…. por aquello de intentar contentar a todos. A pesar de todo no se consiguió ese objetivo, también es sabido que lo que a unos les viene bien, a otros no tanto. Decididos por esta ruta en Cirat, un territorio que desconocíamos en cuanto al pateo se refiere, nos dejo satisfechos por su entorno de grandes posibilidades. Una zona que viene de lujo para darse un baño en sus diferentes lugares para tal fin cuando el calor comienza a apretar.
Este ha sido un día en el que la ausencia de algunos compañeros que no vinieron, fue compensada por la presencia de nuevos amigos que se apuntaron a la excursión. Tres miembros del Club Desplome Onda , Ana, Carlos y Toni que ya conocimos en un casual encuentro, por supuesto en la montaña. Otro de los nuevos asistentes que vino fue por parte de Jose, acogiéndolo ya como uno más del grupo, se llama John. Como podréis adivinar, anglosajón de pura cepa, «guiri» como alguno cariñosamente aventuró a mencionar. En definitiva cuatro trotamundos con los que hemos disfrutado a lo grande y con los que hemos compartido una filosofía común a la hora de salir a la montaña. La primera vez que salía con nosotros y, ¡¡¡JOERRR!!! John tuvo un pequeño percance que pudo ser mas serio de lo que fue, como se suele decir… son gajes del oficio. Por suerte solo quedó en un susto y en un doloroso y abultado pómulo.
Rápidamente contrarrestamos estos momentos de mal rollito, sobretodo él, con un baño en las pozas del barranco de las Salinas, todo un lujo después de terminar prácticamente la ruta. Rematando la faena no iban a faltar las fresquitas cervezas que nos tomamos en el bar de la plaza del pueblo.